Con todos los eventos futbolísticos de la semana de la Inclusión finalizados, el sábado 30 el equipo de Brasil y algunos de nosotros nos unimos a una salida de senderismo organizada por la Concejalía de Medio Ambiente de Paracuellos de Jarama y el Grupo Amadablan de Montañismo. La «Ruta de Leganitos y Barranco de las Viñas», de unos seis kilómetros y medio de longitud, forma parte de la red de senderos de Paracuellos de Jarama. Se puede acceder a la descripción técnica con reseña histórica aquí. La cercanía y la facilidad de acceso hicieron de esta marcha una ocasión excepcional para que los deportistas brasileños conozcan un poco más la belleza natural del lugar en el que estuvieron trabajando toda la semana.
Por la tarde, y como no podía ser de otra manera, parte del grupo realizó una visita turística al centro de Madrid, para acabar la jornada con el tradicional bocadillo de calamares en la zona de Plaza Mayor. Y así acababa oficialmente la semana de la Inclusión organizada por nuestra Asociación Arboleda, que además de las actividades del sábado, consistió en el campus de fútbol infantil, clínics en el campus de tecnificación del Colegio Antamira y en el campus del C.D.Cobeña, intercambios culturales en el desayuno de mujeres de Cobeña y en la residencia de ancianos Geroinnova de Paracuellos, y el torneo relámpago para mayores de 16 años.
Somos privilegiados por haber contado con estos deportistas tan alegres como generosos quienes, con sus propios recursos, han llegado hasta aquí solamente para llevar adelante la semana de la Inclusión y seguir ruta a Egipto para realizar un trabajo similar por unos diez días más. Los voluntarios locales han dado muestras, una vez más, de su abnegación y pasión por los fines de la Asociación: contribuir a la promoción del valor de la familia como pieza clave de la sociedad. Consiguiendo mejores familias, sin dudas viviremos en una sociedad mejor. Agradecemos al Ayuntamiento de Paracuellos de Jarama por cedernos la pista deportiva todas las tardes y especialmente a la Concejalía de Deportes por su disposición a escuchar nuestro proyecto. Y por supuesto, gracias a todos los participantes: niños, jóvenes, padres y abuelos. Sin ellos, la semana de la Inclusión no habría podido realizarse y, en todo caso, habría carecido de significado.
Cuando todo parecía concluido, continuó un poco más. Fuera de programa, la Iglesia Evangélica de Cobeña quiso reconocer el trabajo que varios de sus miembros realizan en nuestra Asociación y paralelamente, despedir a los brasileños a quienes había hospedado durante la semana. Para ello, trasladó su celebración semanal a la sala «A tu rollo», en la que hubo café, música, palabras emotivas, alguna lagrimilla, un mensaje significativo, obsequios y un tiempo social en el que nadie se quedó con las ganas de conversar con el grupo e intercambiar datos para mantener contacto con ellos.
La Brasil Soccer Academy prometió volver, nosotros los esperamos…
Increíble semana. Gracias por permitirnos participar en ella.